La hepatitis es una enfermedad caracterizada por una inflamación del hígado. Esta suele ser causada por una infección viral y se divide en cinco tipos principales: A, B, C, D o E -que causan muertes y tienen potencial de brotes y epidemias-
El diagnóstico de la hepatitis es fundamental. Su detección a una etapa temprana puede ser la acción que permita que la persona sea tratada a tiempo. Incluso salvada, si se trata de un tipo crónico y/o mortal.
¿Cómo saber que tengo Hepatitis?
Toma en cuenta que hay personas que no tienen idea de que tienen esta enfermedad. Ocurre muy frecuentemente con la hepatitis tipo C, debido a que no produce síntomas en una etapa temprana.
Por eso, lo mejor que puedes hacer es conocer cada tipo de hepatitis para tomar precauciones y conocer las diferentes opciones de tratamiento para tratar la enfermedad.
Tipos de Hepatitis:
Hepatitis A
- Trasmisión: la hepatitis tipo A se contagia por medio de los alimentos que se encuentran contaminados o por el consumo de agua que no ha sido tratada correctamente y, como resultado, está contaminada. También se contagia por tener contacto con una persona infectada, incluso si esta no tiene síntomas. Las heces son el factor clave de contagio.
- Prevención: no bebas aguas de fuentes de dudosa procedencia y ten una buena higiene con tus alimentos. Igualmente puedes vacunarte y lavar tus manos con frecuencia.
- Tratamiento: esta enfermedad suele eliminarla el mismo cuerpo en el paso de unas semanas, con descanso e hidratación. Sin embargo, esta puede complicarse y llegar a ser mortal.
Hepatitis B
- Trasmisión: este tipo se contagia por medio del contacto de fluidos corporales, pero como puede ser la sangre. Puede darse al tener relaciones sexuales, en el parto de madre a hijo, al compartir cepillos de dientes, al compartir agujas o cuchillas de afeitar.
- Prevención: la vacuna es el principal mecanismo de prevención. Igual se recomienda usar preservativos, no compartir productos personales (agujas, cepillo, hojillas de afeitar, corta-uñas), evitar hacerse perforaciones o tatuajes en lugares sin licencia. Los bebés deben vacunarse en menos de 12 horas después de nacer si su madre la tiene.
- Tratamiento: hay medicamentos para ralentizar la replicación del virus y puede provocar su eliminación. Lo verdaderamente importante sobre estos medicamente es que reducen el riesgo de tener cirrosis hepática o cáncer de hígado.
Hepatitis C
- Trasmisión: se contagia por medio del contacto de la sangre de una persona con la sangre de otra. En este sentido, se puede dar por compartir inyecciones, equipo médico mal esterilizado, productos sanguíneos no analizados. Igualmente se puede trasmitir por prácticas sexuales donde hay contacto con la sangre.
- Prevención: no hay vacuna para prevenir la hepatitis C. Lo que puedes hacer es no compartir agujas u otros productos de uso personal (navajas, cortaúñas, cepillo de dientes), así como no hacerte tatuajes o perforaciones en instalaciones sin licencia.
- Tratamiento: se utilizan fármacos para curar la hepatitis C. Nuevamente, mientras antes se diagnostique mejor, especialmente porque el tratamiento disminuye el riesgo de presentar cirrosis hepática o cáncer de hígado.
Hepatitis D
- Trasmisión: se trasmite cuando se tiene contacto con sangre infectada.
- Prevención: se da solo si ya tienes hepatitis B y, como resultado, puedes prevenir vacunándote contra la hepatitis B. No compartas agujas, afeitadora ni ningún otro producto de uso personal y evita hacerte tatuajes/perforaciones en lugares inadecuados
- Tratamiento: fármacos.
Hepatitis E
- Trasmisión: se tramite por consumir alimentos o agua contaminada con heces infectadas, como la hepatitis A. Ocurre cuando el saneamiento es deficiente.
- Prevención: puedes vacunarte si tienes acceso a esta vacuna. Si no, evita beber agua no tratada o potable, lava tus alimentos y mantén una buena higiene.
- Tratamiento: las personas suelen recuperarse por sí mismas, por medio del reposo y la hidratación, aunque algunas necesitan ser hospitalizadas.
Considera que todos estos tipos de hepatitis pueden volverse crónicas (como la B y la C), por lo que es necesaria su detección temprana.
¿Cuáles son los síntomas y vías de diagnóstico?
Los síntomas suelen ser los mismos en todos estos tipos de hepatitis. Incluye fatiga, náuseas, pérdida de apetito, dolor en la zona del hígado, orina oscura, ictericia, picazón y dolor muscular.
En el caso de la hepatitis C, suele ser asintomática hasta estar en una etapa avanzada, en la cual pueden darse esto síntomas, así como hemorragias frecuentes o la aparición de hematomas.
La hepatitis B, C y D pueden llevar a la cirrosis hepática y al cáncer de hígado, por lo que hay que tener cuidado. La hepatitis A puede ser mortal, así como la D. La B y la C pueden volverse crónicas y complicarse.
En cuanto al diagnóstico, el más común y accesible es por medio de un análisis de sangre. Existen pruebas para cada tipo de hepatitis. Igualmente hay otros mecanismos como la ecografía hepática o biopsia de hígado.
Así que… no dejes de examinarte, acudir al médico y realizar las pruebas pertinentes para detectar esta enfermedad viral a tiempo.