La labor de FundaHígado es un conglomerado de esfuerzos y trabajos, unidos por una misma labor: mejorar la calidad de vida de sus pacientes que sufren enfermedades hepáticas.
Hoy en el día del nutricionista, queremos presentarles y de esta forma homenajear a una profesional que cumple una de las labores más importantes dentro de la fundación, la nutricionista especializada en pediatría, Andrea Jaimes.
Andrea llegó a la organización a través de una «bonita coincidencia» como así lo describe. «Yo llevé a un niño de otra fundación a consulta, donde resulta estaba reunido todo el Equipo de FundaHígado en ese momento estaban buscando gente para unirse al equipo y el Dr. Rivas se me acercó preguntándome si estaba disponible para el cargo de nutricionista, después de unos días acepté y con la recomendación de Mikhael, me uní a la fundación».
Aunque Andrea no tenía planeado formar parte de la organización, tomar la decisión de unirse le ha brindado oportunidades y experiencias maravillosas tanto profesional como personalmente. Estas gratificaciones han venido poco a poco, Andrea comenta «al principio tenía miedo, por la delicadeza de los casos hepáticos…pero me hizo conectar con las familias, ellos ven en mí un apoyo dentro del proceso de la enfermedad».
¿Por qué estudiar nutrición?
Los inicios de Andrea Jaimes en la nutrición fueron muy parecidos al de la organización. Su primera opción era la medicina…»No sabía que era nutrición, por ser muy técnica al principio de la carrera me gustó… se parecía a la medicina.» indica Jaimes. Como en todas las profesiones, al empezar a trabajar fue cuando se percató que estaba donde tenía que estar.
Al mismo tiempo, Andrea comenta que «la nutrición es una carrera con mucho campo por su versatilidad, y con ella puedes ayudar a los demás».
¿Por qué un plan nutricional para un paciente hepático?
Andrea nos indica que cuando el hígado presenta fallas, el cuerpo no puede obtener todos los nutrientes que necesita. Al apoyar los tratamientos con un plan nutricional pensado para cada caso, ayuda a obtenerlos desde otras fuentes de alimentación. Cuando la labor del nutricionista falta dentro del proceso, «puede que el paciente caiga en desnutrición, entra en déficits» comentó.
«El hígado tiene que ver mucho con la nutrición, por la absorción de nutrientes que cumple el órgano.»
Podemos afirmar que el mayor impacto que tiene el trabajo de Andrea en la fundación, es ser el apoyo y brindar herramientas a todos los padres cuyos hijos padecen este tipo de enfermedades.
Cabe destacar, que los mitos y predisposiciones de los padres son uno de sus mayores retos dentro de la fundación. Los pacientes hepáticos llevan un régimen alimentario que debe ser cumplido cuidadosamente debido a las implicaciones que esto puede tener en su salud, un ejemplo claro es el de los lácteos, el gluten y el huevo, estos últimos suelen restringirse dependiendo del avance que presente la enfermedad.
Este tipo de restricciones causa confusión a los pacientes y a sus padres, es ahí cuando Andrea indica los sustitutos adecuados.
Sin duda ser nutricionista dentro de FundaHígado, puede marcar un antes y un después para los pacientes. Con su orientación facilita en el acompañamiento de pacientes con condición de postrasplante y en la evolución para optar por un trasplante.
¿Conocían la influencia de la alimentación en las enfermedades hepáticas?
Celebremos un día más, que contamos con profesionales capacitados para mejorar la vida de tantos niños que necesitan nuestra ayuda. Felicidades a Andrea Jaimes por su vocación y esfuerzo dentro de la fundación y a todos los nutricionista de nuestro país en su día.
Mantente informado sobre nuestro equipo y su labor, a través de nuestra web FundaHigado.
